10 Utiles Consejos Para Aprender A Escuchar Efectivamente

Escuchar es la capacidad de recibir e interpretar con precisión los mensajes en el proceso de comunicación. Este concepto deja fuera la simple mecánica de oír y nos indica que la mayoría de nosotros debemos ejercitar la acción de escuchar.

Prestar atención sigue siendo la clave de toda comunicación efectiva, sin la capacidad de escuchar de forma eficaz los mensajes se confunden fácilmente la comunicación se interrumpe y el emisor puede frustrarse o irritarse.

Una gran habilidad a dominar: Aprender a escuchar

Escuchar es tan importante que los mejores empleadores proporcionan capacitación a sus empleados sobre la forma efectiva de escuchar. Esto no es de sorprender si consideramos que las buenas habilidades para escuchar puede llevar a: mejorar la satisfacción del cliente, mayor productividad con menos errores, un mayor intercambio de información, y en consecuencia los empleados sean más creativos e innovadores.

La escucha efectiva es una habilidad que sustenta todas las relaciones humanas positivas, y dedicarle tiempo a pensar y a desarrollar su capacidad de escucha es uno de los bloques que fundamentan el éxito.

La habilidad de escuchar también tiene ventajas en nuestra vida personal, incluyendo:

Un mayor número de amigos y redes sociales, mejora la autoestima y la confianza, grados superiores en la escuela y el trabajo académico e incluso mejorar la salud y el bienestar general.

Los estudios han demostrado que, mientras se habla la presión sanguínea aumenta, durante la escucha atenta se reduce.

Escuchar es diferente a oír

Oír se refiere a la capacidad que tienen los oídos de captar los sonidos, mientras que escuchar requiere más que eso: es preciso centrarse. Prestando atención no sólo a la historia, sino cómo se dice, el uso del lenguaje y la voz, considerando también la forma en que la otra persona usa su cuerpo. En otras palabras, significa estar consciente del mensaje verbal como de los mensajes no verbales. Su habilidad para escuchar eficazmente depende del grado en que puede percibir y comprender estos mensajes.

Tenemos dos oídos y una boca

Fuimos diseñados para recibir información a través de nuestros sentidos, aquellos que tienen prioridad se encuentran más cerca del cerebro. El cuerpo fue provisto de dos ojos, dos oídos y una boca, la naturaleza parece estar indicando nuestras prioridades para evaluar las situaciones. Con los ojos al frente, los oídos a la altura de los ojos pero detrás de ellos y la boca en la parte inferior. Observa, escucha y luego habla.

Las 10 Bases de escuchar

Un buen oyente escuchará no sólo lo que se dice, sino también lo que queda oculto o se dice parcialmente.

La escucha efectiva implica observar el lenguaje corporal notando las inconsistencias entre el mensaje verbal y el no verbal.

Por ejemplo, si alguien te dice que está satisfecho con su vida, pero lo dice entre dientes o con lágrimas en sus ojos, hay que considerar que la información verbal y la no verbal están en conflicto, que quizás no significan lo que dicen.

1. Deje de hablar

Pare de hablar, escuche. Cuando alguien está hablando no escucha lo que están diciendo los demás, deje de interrumpir, no hable al mismo tiempo que las otras personas o termine sus oraciones. Hable solo, cuando la otra persona haya terminado de hablar y usted necesite aclarar para asegurarse de que ha recibido su mensaje con precisión. Para esto puede hacer uso del parafraseo es decir con sus propias palabras trate de emitir el mensaje que ha recibido y si es preciso aporte la información adicional apropiada.

2. Prepárese para escuchar

Relájese. Céntrese en el que habla. Despeje su mente del ruido mental. La mente humana se distrae fácilmente con otros pensamientos: ¿Qué hay para comer?, ¿a qué hora tengo que tomar mi tren?, ¿lloverá hoy?. Concéntrese en el mensaje que recibe.

3. Haga las cosas fáciles para el orador

Recuerde utilizar gestos o palabras para animar a las personas a continuar hablando. Mantenga el contacto visual, demuestre que está escuchando y comprendiendo lo que se dice. Evites los gestos de desaprobación.

4. Elimine las distracciones

No mire por la ventana, ni se corte las uñas, ni bostece o nada similar. Evite interrupciones innecesarias. Estos comportamientos perturban el proceso de escucha y envía el mensaje de estar aburrido o distraído, irrespetando al que habla y la importancia de su mensaje. Si esta cansado y no es un momento apropiado para escuchar a la persona, disculpe y programe otro momento en el cual pueda conceder toda su atención.

5. Empatizar

Aprenda a escuchar y trate de entender el punto de vista de la otra persona. Mire los problemas desde la perspectiva de la otra persona. Abandone de las ideas preconcebidas. Con una mente abierta podemos empatizar más plenamente con quien habla. Si el emisor dice algo que usted no está de acuerdo espere que concluya su argumento para oponerse, pero mantenga una mente abierta a las opiniones y los puntos de vista de los demás.

6. Sea paciente

Una pausa, incluso una larga pausa, no significa necesariamente que el orador haya terminado.

Tenga paciencia y permita que el orador continúe a su propio ritmo, a veces toma tiempo formular lo que se quiere decir y cómo decirlo. Por eso es conveniente nunca interrumpir o terminar una frase para alguien.

7. Evite los prejuicios personales

Intente ser imparcial. No se irrite y no deje que las maneras del orador lo distraigan de lo que está diciendo realmente. Cada quien tiene una forma diferente de hablar: algunas personas son más nerviosas o tímidas que otras, algunas tienen acentos regionales o hacen movimientos excesivos con sus brazos, incluso les gusta el ritmo o se quedan inmóviles mientras hablan. Céntrese en lo que se dice e intente omitir lo innecesario.

8. Escuchar el tono de voz

Un buen orador utilizará tanto el volumen y el tono como una ventaja para mantener a un público atento; todo el mundo usa el tono y volumen de voz en determinadas situaciones, por eso captar el énfasis le permitirá entender la importancia de lo que se dice.

9. Escuche ideas - no sólo palabras

Necesitamos la imagen completa, no solo de fragmentos aislados. Quizás uno de los aspectos más difíciles de escuchar es la capacidad de unir fragmentos de información para revelar las ideas de los demás. Con la concentración adecuada, dejando ir las distracciones, hará que enfocarse sea más fácil.

10. Espere y observe la comunicación No Verbal

Los gestos, expresiones faciales y movimientos oculares pueden ser importantes. Los ojos, ven y recogen la información adicional que se transmite a través de la comunicación no verbal. La postura de quien habla puede trasmitir desde inconformidad con el tema tratado hasta dar énfasis en puntos importantes.

En resumen la habilidad de aprender a escuchar le ayudará a tomar decisiones de relevancia, tanto como mejorará su comprensión y el trabajo en equipo

SEÑALES QUE INDICAN ESCUCHAR